LOS NIÑOS PUEDEN SER MEJORES PEATONES CON TU AYUDA
Un simple paseo es una oportunidad perfecta para comenzar el trabajo de inculcar buenos hábitos de educación vial, unos buenos hábitos que poco a poco irán dando su fruto.
Los primeros aprendizajes fundamentales para los niños como peatones son:
• Ir siempre de la mano de un adulto por la vía pública.
• Conocer las zonas seguras para caminar y jugar (la acera). Debemos enseñarles que en todo momento deben moverse y permanecer en la parte interior de la acera, lejos del bordillo, sin invadir el carril bici, y prestando mucha atención a las salidas de los garajes.
• Cruzar siempre por los lugares señalizados para ello, de forma segura y correcta. Antes de poner el pie en un paso de peatones, tanto si se trata de uno regulado por un semáforo como sin éste, tendrán que mirar a ambos lados (aunque la vía sea de una sola dirección), nunca pasar corriendo, y no cruzar en diagonal o en zigzag. Ya desde los dos o tres años un niño es capaz de entender que en los semáforos nunca se cruza mientras el muñeco esté en rojo, y que ha de hacerlo cuando aparece el muñeco de color verde.
• No acercarse a los coches, aunque estén parados. Debemos enseñarles a no jugar alrededor de los vehículos, ni situarse nunca detrás, ya que es muy probable que el conductor no los vea (sobre todo a los más pequeños, por su estatura más baja) cuando va marcha atrás. Siguiendo esta precaución de visibilidad, es conveniente enseñarles a cruzar al menos tres metros por delante de un vehículo, y a que nunca han de cruzar la calle pasando entre dos coches estacionados.
• Para subir o bajar de cualquier vehículo siempre hay que hacerlo por la puerta que esté al lado de la acera. Además, una vez que bajen (principalmente del autobús), deben esperar a que éste se vaya para poder tener una visión completa de la calzada y poder moverse de forma segura, por ejemplo si tienen que cruzar.
• No hay que dejar nunca los juguetes, los patinetes o las bicicletas en la vía. Además, deben aprender cuanto antes a no correr detrás de una pelota sin asegurarse previamente de que no viene ningún coche.
• En el caso de que no haya acera, el pequeño tendrá que aprender a caminar siempre por el lado izquierdo de la calzada, de frente a los vehículos.
Los niños son auténticas esponjas que absorben todo lo que observan a su alrededor, aprenden por imitación, y en las edades más tempranas es cuando son más receptivos para interiorizar normas y comportamientos adecuados.
AUTOESCUELA GRAN VIA SALAMANCA